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Magíster en Comunicación Social, Consultor en Comunicación, Crisis Corporativas y RSE. Socio de Global Business Comunicaciones, www.gbcom.cl, Santiago de Chile http://cl.linkedin.com/in/sergiov1

lunes, 16 de mayo de 2016

MANUAL DE REPUESTAS EN CASO DE UNA EMERGENCIA / 4 de 4



Tiempo de Programa.  ¡Showtime!

   Durante la entrevista, recuerda:


  1. Se calmo y sólo demuestra entusiasmo si corresponde. En un tema delicado, donde no existan pérdidas humanas o graves perjuicios sobre la población o el bien común, podría “sonar” interesante si el entrevistado es entusiasta o sólo comunica con inteligencia sus puntos de vista. Sobretodo en la etapa de crisis y post crisis.

  1. No abrumes a tu audiencia con hechos y estadísticas – en exceso son aburridas. Si puedes ilustra tus puntos con “historias”. Como en cualquier discurso, las historias complementarias cortas añaden énfasis. Ellas logran atraer la atención, son didácticas y crean empatía.

  1. Ten cuidado con las expresiones humorísticas. Estás hablando ante una enorme audiencia y por resuelto que esté el tema tratado, si fue o es una crisis compleja, es mejor poner énfasis en cómo la empresa abordó el problema, lo solucionó o lo está haciendo. No querrás ofender a nadie, sino mantener una imagen positiva y credibilidad intactas.

  1. Escucha cuidadosamente. Ignora las cámaras, monitores, micrófonos y gente alrededor del espacio, manteniendo la atención en quien te formula las preguntas.  No serás capaz de contestar una palabra si no has escuchado qué se te preguntó.

  1. Se tú mismo, no imites a nadie. No actúes rígido, formal o trates de impresionar a todos con tus conocimientos. Arriesgas verte mal sin necesidad. Se un conversador relajado e inteligente y ten una compostura ajustada al contexto.

  1. Mantente en calma. Bajo ningún punto de vista puedes alterarte o ponerte a la defensiva ante las preguntas que recibas.  (Más adelante revisamos consejos de cómo manejar las preguntas difíciles).

  1. Tienes que saber dónde mirar. Si eres invitado a un programa de entrevistas sin público, deberás mirar directamente al entrevistador, no a la cámara. Si hay público, deberás mirarlos sólo ocasionalmente. No intercales bruscamente la mirada entre el entrevistador y la audiencia. Si vas a mirar al público dirige tus ojos hacia ellos lentamente y míralos por algunos segundos antes de regresar tu cabeza hacia el entrevistador.

FRASES DE ENLACE

A continuación, algunas ideas sobre la manera en que puedes vincular tus “puntos o ideas fundamentales” con el tema de conversación. Esto es posible mediante el empleo de “frases de enlace”. Algunos ejemplos:

“Me gustaría añadir…”

“También es necesario recordar…”

“Lo fundamental es…”

“Al respecto…”

“De lo que se trata es de…”

“El tema/la preocupación/el problema real es…”

“Lo que importa aquí es…”

“Igualmente importante es…”

“Aunque __________ sin duda tiene importancia, no debemos olvidar…”

“No olvidemos que…”

“Nuestro papel/nuestra labor/nuestro objetivo consiste en…”

“Nuestra prioridad/compromiso/meta es…”

“Lo cierto es que…”

“El quid de la cuestión es…”

“Esa es una pregunta interesante, pero…”

“Esa es una pregunta muy interesante, pero me permito recordarle que…”


Tu Apariencia

Tu apariencia física en televisión es importante. Cómo te veas afectará tu imagen y hasta tu credibilidad. Cuando estés preparando para tu presentación, recuerda:

·         Vestir apropiadamente. Por lo general, hombres y mujeres deben vestir de manera conservadora en colores neutros. Evita usar un rojo intenso o ropa blanca, joyería brillante o rayas.

·         Evita hacer movimientos rápidos o gestos excesivamente amplios.  Eso hace que sea difícil para el operador de la cámara seguir tus movimientos. Usa gestos lentos y cercanos al cuerpo.

·         Usa moderadamente la variedad vocal. Habla como si te estuvieras dirigiendo a una sola persona, no a una audiencia de miles.

La televisión es un medio visual. Tu apariencia afecta tu imagen, por lo tanto también afectará  la imagen de tu empresa. Por eso es importante que te veas lo mejor posible.

Varios días antes de la entrevista, procura que el Departamento de RRPP se contacte con el estudio y pregunte qué color se usará como fondo donde será tu presentación.

Si usas un traje beige y el fondo está pintado del mismo color, desaparecerás. Usa ropa que contraste con el color de fondo.    

Pregunta qué color deberías usar, sólo para estar seguro.

Vestirse de manera conservadora. Las mujeres pueden usar un traje neutro con una blusa en color claro o un vestido en color oscuro.

Evita los estampados –porque distraen– y faldas abiertas que necesitan mantenerse cerradas cuando estás sentada. No uses joyería o accesorios brillantes, ruidosos y demasiado grandes. No utilices adornos brillantes en el pelo. 

Trata de eliminar toda distracción.
Para los hombres trajes de color neutro son los mejores, con una camisa azul claro y una corbata conservadora.

Evita usar ropa a cuadros y estampados escoceses, ya que pueden saturar los colores en la pantalla. Lo mismo ocurre con el rojo intenso, el blanco y las rayas.

Evita el fúnebre negro, te apaga.

Las camisas pueden ser más claras que los trajes, pero ni negras del todo ni completamente blancas.

También pueden usarse azules fuertes, grises y otros colores oscuros.

Se deberán usar calcetines idealmente hasta la rodilla y que complementen el color del traje y zapatos.

Evita las corbatas con estampados brillosos o con joyería. Evita usar cadenas de oro y brazaletes porque reflejan la luz.

Si tú usas lentes, no los uses en cámara a menos que sea necesario, ya que reflejan la luz.     

Nunca uses lentes fotocromáticos ya que cambian y se oscurecen con la intensidad de la luz del estudio, que los hará verse oscuros.

El maquillaje es esencial aun para los hombres. Usado apropiadamente puede mejorar tu apariencia, ya que las brillantes luces pueden hacerte parecer pálido y cansado.

El maquillaje deberá tener un acabado mate del mismo tono de tu piel. No debe notarse en cámara.

El polvo es necesario para hombres y mujeres – reduce el brillo y resplandor.       

Las mujeres deberán evitar usar sombras azul oscuras en los ojos y rojo en los labios; el naranja, cafés y color canela lucen mejor en televisión.

Aplica poco maquillaje cuidadosamente. No exageres el uso del maquillaje o tendrás apariencia de payaso.

La cámara de televisión puede aumentarte de 5 hasta 10 kilos de lo que tú tienes actualmente.          

Usa trajes que te hagan parecer delgado – colores oscuros, sin rayas horizontales, y líneas simples.

Siéntate sobre los faldones de la chaqueta para evitar que la prenda de vestir se abulte sobre los hombros.

Asegúrate de que tu vestimenta parezca adecuada, ya que una buena presentación personal será sinónimo de que has comprendido cómo facilitar tu responsabilidad como vocero y de ese modo  hacer lo correcto.

Recuerda:

Trata de demostrar tu interés por lo que estás tratando.

Dentro de lo posible, mira a la persona que te esté formulando las preguntas.

Evita sentarte tras un escritorio, ya que eso te alejará de los televidentes.


Tú y la Cámara de Televisión

“¿A dónde miro?” es una pregunta frecuente en quienes aparecen en televisión por primera vez. Personas sin experiencia no saben si deben mirar a la cámara, a la audiencia o al entrevistador.

La respuesta es: “Depende de la situación”.

Si los periodistas están reporteando in-situ, informando en directo con presentaciones en vivo o grabadas, por lo general deberás dirigirte directamente hacia la cámara que “está al aire”. 

Notamos que la cámara “está al aire” por la luz roja que tiene encendida. Cuida que tus ojos no divaguen – porque te verás nervioso y parecerá que te perdiste.

En un estudio de televisión hay varias cámaras que graban desde distintos puntos de vista y se alternan para salir al aire. ¿Cómo saber cuál está grabando?, por la luz roja que tiene encendida arriba. La luz roja de una cámara se apagará y se encenderá otra que está “al aire” ahora, el “encargado de piso” (coordinador de programas de TV en vivo) señalará esa cámara. Simplemente, transfiere tu mirada hacia la nueva cámara tan tranquilamente como sea posible. Recuerda, la cámara es tu audiencia. Háblale como si fuera alguien cercano. No fijes tu mirada en ella con los ojos muy abiertos.

No te preocupes por encontrar la cámara correcta para mirar hacia ella. Es trabajo del director o del camarógrafo encontrarte.

Si tú eres un invitado en un programa de TV o noticiario sin público en el estudio, mira directamente al entrevistador, no a la cámara.

Si hubiera público, deberás mirarlo ocasionalmente. No dejes que tus ojos vayan ininterrumpidamente del entrevistador a la audiencia. Si vas a mirar al público dirige tus ojos a la audiencia lentamente, mírala por algunos segundos antes de voltear tu cabeza.

Cuando seas entrevistado, mantén tu atención centrada en tu entrevistador.

Ignora los monitores de televisión, luces, cámaras que se mueven y la gente del estudio que va de aquí para allá,  no mires con curiosidad más allá de tu espacio. Perderás tu concentración.

Mira a las personas específicas en el estudio, y no ha quienes se estén moviéndose de un lado hacia otro. Lee tus notas ocasionalmente si es necesario.

No hagas nada que no quieras que te vean haciendo en frente de miles de personas.

Los medios usualmente llevan cámaras portátiles de televisión a las conferencias de prensa y todos ellos pueden estar grabando al mismo tiempo.

En esa situación, evita mirar directamente a cualquier cámara. En lugar de eso, mira directamente a quien te hizo la pregunta.

Cuando des un comunicado preparado, evita leer tus notas.

Recuerda que debes estar alerta en todo momento, aunque no estés hablando.

Si la entrevista es en una unidad móvil de televisión y estás cerca de personas que conoces, no mires hacia ellas. Permanece concentrado en el entrevistador.


Gestos y Movimiento Corporal

En televisión, quieres aparecer seguro y con una buena postura, no nervioso ni tenso.

Tus gestos, movimiento corporal y expresiones faciales serán los principales indicadores de tu confianza o nerviosismo, y todos ellos son magnificados por la cámara, en particular si el director quiere aprovechar expresiones faciales que denoten incomodidad y tensión a través de primeros planos que se acercan al rostro.

El ser humano es capaz de controlar su rostro y utilizarlo para transmitir mensajes. También refleja nuestro carácter, ya que las expresiones habituales dejan huellas. Hay más de mil expresiones faciales diferentes, anatómicamente posibles, los músculos de la cara son tan versátiles que una persona podría mostrar esta gama en dos horas. Se debe establecer que sólo unas pocas expresiones poseen un sentido real e inequívoco.

Por ejemplo la sonrisa defensiva, como gesto de pacificación. Piensa en el invitado que sonríe con incomodidad cuando llega tarde a una cena.

Es importante que practiques tus movimientos y expresiones para que te luzcas al máximo.

Una sonrisa que no provoca más que pequeñas arrugas alrededor de los ojos o está acompañada de una postura corporal caída, puede parecer forzada. Los llamados “kinemas portadores de sentidos” deben ser cuidados, como cejas levantadas, bajas, contraídas o movidas por separado, movimientos de la boca o de la cabeza, etc.

Una cámara de televisión puede producir una gran variedad de tomas o cuadros – acercamientos, aperturas de ángulos, etc.- desde un mismo sitio, por lo tanto, no te preocupes por ella, nunca podrás adivinar qué toma está haciendo la cámara.

La mayoría de las tomas serán de tu cabeza y hombros.

Cuando estés en una entrevista o en un programa de entrevistas siéntate en una posición cómoda con los hombros hacia atrás.

No estés rígido porque te verás tenso.

Ten cuidado de no estar demasiado relajado, desgarbado.

Mantén tus pies en el piso y pon tus manos en tu regazo o en los brazos de la silla cuando estés escuchando a los demás.

Cuando hables, inclínate ligeramente hacia delante.

Si estás sentado en una silla giratoria, ten cuidado de no bailar en ella. No te muevas. 

Si tienes que estar de pie durante tu presentación, que tu postura sea cómoda, con los hombros derechos y el peso del cuerpo bien distribuido en ambos pies.

No te balancees de un pie a otro, ni recargues el peso sobre uno solo. No te apoyes en nada.   

Si debes caminar, da pasos pequeños para que la cámara pueda seguirte.

Evita hacer gestos amplios y rápidos. Ellos hacen difícil que el camarógrafo pueda seguirte y como resultado tus brazos o manos no saldrán en el cuadro de cámara. Usa gestos lentos y cercanos al cuerpo.

No muevas los brazos y manos en dirección a la cámara porque se distorsionarán. 

Asegúrate que tus gestos sean apropiados y naturales.

Especialmente, ten cuidado si tienes hábitos nerviosos, como mover los dedos y hacer ruido, tocar la corbata o arreglarte el pelo. Nuevamente, estos se magnificarán en cámara y serán notados por todos sin dificultad.

También ten cuidado con tus expresiones faciales. Fruncir el ceño, achicar los ojos o fruncir las cejas pueden hacerte aparecer preocupado, a la defensiva o tenso.

Relaja tus músculos faciales y sonríe cuando sea apropiado. Una sonrisa leve de empatía, no de felicidad plena, te dará una apariencia relajada y amistosa.

Si tu presentación incluye material de apoyo como imágenes, cuadros estadísticos, gráficos o presentaciones, practica antes de la grabación con los camarógrafos para que estén preparados para seguirte. 

Asegúrate de que no caminarás “fuera de cuadro”.


Micrófonos

Los micrófonos son una parte importante de tu presentación en televisión. Es importante que sepas que hay varios tipos de ellos para darles un uso apropiado.

·         Micrófono de mano. Si sostienes este tipo de micrófono en tu mano planeando moverte mientras hablas, asegúrate de tener suficiente cable para poder hacerlo. Los micrófonos de mano son los más incómodos, porque una mano siempre tiene que sostenerlo y eso restringe tus movimientos. Debes tener cuidado de no hacer movimientos con la mano que sujeta el micrófono porque el sonido bajará de intensidad tan pronto lo alejes de tu boca. Debes mantenerlo siempre en un mismo nivel.

·         Micrófono Lavaliere. Este es el más popular de los micrófonos, es pequeño y se sujeta a la blusa, camisa, solapa o puede colgar de tu cuello con un cordón.  Deberá estar de 15 a 23 centímetros, debajo de tu mandíbula. Ajustado antes de que el programa inicie. El micrófono lavaliere te permite completa flexibilidad de movimientos considerando que es inalámbrico y puedes llevarlo sobre tu cuerpo. Sin embargo, este micrófono es tan sensible que puede captar una respiración pesada o el sonido de la ropa al moverse contra él. Evita estos ruidos molestos, no toques la zona donde está ubicado el micrófono.

·         Micrófono boom o “caña”. El micrófono boom es el que está suspendido por un apoyo o base larga que se sostiene sobre el área del escenario. Este micrófono puede ser movido hacia arriba, abajo o a los lados para recoger las voces. También es muy sensible. Estos micrófonos están fuera del área de visión de la cámara para que la audiencia no pueda verlos. No te preocupes de que la gente no te escuche ya que el operador de este micrófono te seguirá conforme te muevas.

·         Micrófono inalámbrico.  Estos micrófonos se sostienen en la mano sin cable, operan a base de baterías y son ideales para caminar, en caso necesario.

Antes que el noticiario parta, revisa con el encargado de sonido que el micrófono funcione. Habla normalmente hacia el micrófono para que puedan regular el volumen correcto. Usa tu variedad vocal con moderación. Recuerda hablar como si lo hicieras con una sola persona, no con una audiencia de miles. Variar demasiado tu tono o volumen de voz sólo molestará a la audiencia y te hará ganar inseguridad. Durante el programa, evita toser, dar golpes con los dedos, hojear el papel o golpear el micrófono. Fíjate en lo que dices, siempre asume que el micrófono está encendido.


Ayudas Visuales

Los materiales de apoyo visual pueden añadir énfasis a tu mensaje, pero úsalos con moderación.

Las ayudas visuales pueden favorecer mucho las presentaciones por televisión.   Diapositivas, gráficos, fotografías, videos y objetos tridimensionales pueden ilustrar tu tema y reafirmar tu mensaje. Solo debes asegurarte que cualquier ayuda visual esté relacionada estrechamente con el tema, que podrá ser vista adecuadamente y entendida por tu audiencia.

Crea tu material de apoyo visual de manera simple y ordenada. Demasiados detalles no pueden ser vistos. Para imprimirlos, deja bastante espacio entre letras y líneas. Debido a que las superficies brillantes reflejan la luz y causan destellos, todos los visuales deberán proyectarse sobre superficies opacas. Los colores deberían ser contrastantes. Cada material debe enfatizar sólo un punto.

Ensaya con tu material visual antes que el programa empiece para que seas capaz de presentarlos con calma durante el programa. Si es necesario, numéralos para que puedas presentarlos en el debido orden. Recuerda hablar hacia la audiencia, no hacia tu material y no los acerques al lente de la cámara, el camarógrafo sabe hacer su trabajo.


RECAPITULANDO
ALGUNAS TÁCTICAS

Nunca respondas la llamada de un periodista que no conozcas. Déjale dicho que lo llamarás de nuevo, ya que primero necesitas tiempo para saber quién es, qué desea y por qué. Se cometen errores cuando las personas se precipitan en entrevistas sin analizar las intenciones del reportero. 

Por ingenuidad, se puede caer en la estrategia de un periodista independiente que miente diciendo que pertenece a un medio reconocido, llama desde un teléfono público y no tendrá  problemas en desacreditarte o a tu compañía si eso le permite tener una buena historia.

A la mayoría de los periodistas les asignan una historia y sólo quieren información. Una vez que compruebas de quién se trata, si cooperas y le cuentas hechos lo suficientemente interesantes para citar, puede ser que se interese por tu versión de la historia, probablemente te irá mejor que si no respondes.

Anticipa preguntas probables y piensa en tus respuestas. También juega a invertir los roles, si tu fueras el periodista o la audiencia, qué preguntas o temas te gustaría consignar para la historia?.

Piensa: Quién es mi público?, Qué quiero que recuerde?, Por qué propósito me están entrevistando y por qué me escucha el público?

El error más común que se comete ante una entrevista es esperar a que el periodista formule las preguntas que le permitirán sacar a relucir los puntos de su plan. Eso no puede ocurrir nunca. 

Las entrevistas impresas te proporcionan tiempo para explicar. Pero las entrevistas en radio y TV requieren respuestas tipo “titulares”, frases vivas resumidas en pocas palabras.

Los reporteros y la gente a quien entrevistas se convierten en extraños cuando cada parte trata solamente de seguir su propio plan y se niega a consignar las necesidades de la otra persona. Pregúntate: ¿Cómo puedo construir un puente entre el plan del periodista y mi propio plan?

EUFEMISMOS

Puedes reemplazar algunos términos considerados negativos para evitar que tu mensaje también sea considerado como tal.

En vez de decir “Pérdidas”, puedes decir “ganancias netas con ingresos deficientes”.

Una empresa de celulosa obtiene su producto de los árboles, pero utiliza el término “unidad de reforestación”.

Un eufemismo mal usado fue la palabra “evento” reemplazando los “hoyos” en la calles de Santiago, lo dijo un intendente de la región metropolitana y se convirtió en una broma.

Cuando el dinero de algún banco no redunda en unidades de reforestación, se habla de “inversiones no representadas”.

Hoy en día no te echan del trabajo, sino que “prescinden de ti”.

No se roban los fondos de las empresas, son “indebidamente utilizados”.

Incluso las mentiras se convierten en “desinformación”.

MANTEN LA CALMA

Un periodista puede buscar provocarte con la esperanza de que estalles y filtres información sensible, o salgas con algún dato controvertido. Las técnicas periodísticas para desvelar información importante incluyen acosarte y preguntarte algunas cosas básicas una y otra vez. No asumas estas estrategias como un asunto personal.

Una vez ha empezada la entrevista, hay poco que puedas hacer, excepto ajustar tu cinturón de seguridad, permanecer calmado, sonreír y dar respuestas precisas, muy cortas.

Si durante la entrevista notas una elevación en el tono, volumen y ritmo del reportero, tu respuesta deberá ser amistosa, serena y pausada. Cuanto más inflamable sea el periodista, más frío debes ser tú.

El rol ideal del periodista, es el de un observador atento, cuidadoso, que olfatea intrusos y protege el interés público.

CONTRA LA MANIPULACIÓN

Una buena regla contra la manipulación periodística es: cuanto más difíciles sean las preguntas, más cortas deben ser tus respuestas.

El silencio es un enemigo en la televisión, deja que le periodista se haga cargo de llenar los espacios.

No te arriesgues. Sea en TV, radio o una entrevista impresa, di lo que tengas que decir y detente. 

En la confusión que puede producirse en las entrevistas informales de pasillo, donde hay diez o doce reporteros presionando alrededor tuyo, empujando micrófonos hacia ti y gritando preguntas, puedes mantener la calma y presentar el tema tal como lo habías preparado para la televisión. O salir del paso. Si las preguntas son turbias o veloces, puedes tranquilizarlos diciendo algo como “Déjenme decirles simplemente”… Los reporteros se apaciguarán para escucharte. Una vez que se tranquilicen puedes dar el discurso que tenías preparado. A penas hagas una pausa, el bombardeo de preguntas comenzará nuevamente.

Si te ves complicado acosado por millones de preguntas al unísono, intenta seleccionar una pregunta sencilla y respóndela mirando al reportero que la haya formulado. Trata de bajar el tono, hablando calmadamente. Si gritas, los televidentes puedes percibir que estás a la defensiva.

Debes estar habituado a repetir tu historia varias veces a diferentes periodistas, conservando tu energía y frescura. Algunos periodistas, de TV o prensa escrita, querrán acorralarte con una entrevista individual. O puede ocurrir que tengas que dar una serie de entrevistas sobre el mismo tema en un período de varias horas o días. Probablemente sentirás la necesidad de decir algo nuevo o diferente sólo para evitar tu propio aburrimiento. Debes presentarte ante cada periodista como si fuese la primera vez, así evitarás transmitir un mensaje equivocado. Lucha contra el tedio y continúa con tu plan en tanto funcione.

Recuerda, cuando te enfrentas a la prensa, estás ante una relación natural entre adversarios. El reportero es un profesional. No subas al ring si eres sólo un aficionado.   

Para recordar:

Prepárate bien.

Respeta a la persona que te entreviste; sé una fuente digna de crédito.

En la medida de lo posible, habla en términos personales.

Lleva materiales que respalden o demuestren lo que dices.

No te apures. Tómate el tiempo que necesites para responder.

NADA de lo que digas tendrá carácter confidencial. NUNCA. Si no quieres que te citen diciendo determinadas cosas, no las digas.

Di la verdad. No mientas, no exageres, no inventes.

Si hay algo que no sepas, dile al periodista que lo averiguarás. Obtén esa información y pásasela.

Nunca digas “sin comentarios”.

Habla con claridad y en voz alta, siéntate derecho y mira al periodista. Y lo que es más importante…

Lleva a los periodistas a tu carpa, di lo que ajustado a la verdad será la mejor respuesta en ese contexto para tu empresa.
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Lista de verificación Sí No

Planteada la crisis, este check list, debiera ser un apoyo al ejercicio comunicacional.

1.  ¿He pensado cuáles son todas las preguntas que me pueden hacer? _____ _____

2.  ¿Estoy aprovechando todas las oportunidades que se me presentan para mencionar mis “puntos fundamentales”? _____ _____

3.  ¿Son mis respuestas adecuadas para que se difundan? _____ _____

4.  ¿Me explico con claridad? _____ _____

5.  ¿Son mis respuestas lo suficientemente breves? _____ _____

6.  ¿Hablo en un tono suficientemente amable? _____ _____

7.  ¿Estoy suministrando buena información? _____ _____

8.  ¿Me expreso mediante oraciones completas? _____ _____

9.  ¿Estoy empleando palabras o términos que la gente quizá no comprenda? _____ _____

10.         ¿Sueno natural? _____ _____

11.         ¿Sueno nervioso? _____ _____

12.         ¿Estoy leyendo las respuestas? _____ _____

13.         ¿Hablo con una voz clara? _____ _____

14.         ¿Estoy diciendo cosas negativas? _____ _____

15.         ¿Doy la impresión de que sé de lo qué estoy hablando? _____ _____

16.         ¿Estoy usando ejemplos que ayuden a la gente a comprender lo que digo? _____

17.         ¿Estoy usando datos y las cifras correctas? _____ _____

18.         ¿Estoy memorizando mis respuestas? _____ _____

19.         ¿Estoy corrigiendo la información equivocada que contienen las preguntas antes de contestarlas? _____ _____

20.         ¿He evitado decir “sin comentarios?¨ _____ _____

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